Los tabasqueños tendremos una gran oportunidad en las elecciones del 2012: definir con el sufragio la alternancia política en la entidad y contribuir al triunfo de nuestro paisano Andrés Manuel López Obrador. Es oportunidad histórica, por cierto.
Desde hace muchos años nuestro estado ha sido abandonado a su suerte por funcionarios ineptos y corruptos, que acabaron con el campo y la pesca, ignoraron a la escuela pública, soslayaron a la iniciativa privada y se apropian de los dineros públicos mediante varias maniobras, una de ellas el conocido “bono de fatiga”. Por lo tanto urge la alternancia para que se gobierne desde un enfoque humanista pensando en el presente y futuro de las nuevas generaciones.
El apoyo para AMLO es con alegría, generoso, solidario y contundente. Lo hacemos desde el PRD, PT y Movimiento Ciudadano (MC), pero también -y sobre todo- desde quienes no tienen partido, y más aún por quienes han sido engañados por “otro” u otros partidos. El país requiere, por salud pública, una regeneración amplia en su tejido social, con oportunidades de desarrollo para todos y en toda la geografía.
Siempre hemos tenido claro que los -en su momento- candidatos de la oposición no enfrentan a un partido político en el gobierno; enfrentan a todo un aparato de poder, a un régimen con recursos ilimitados, con dependencias que enfocan su programas en la compra de conciencia y votos, con líderes de taxis y microbuses que ponen al servicio del candidato oficial las flotillas de vehículos con chofer, con funcionarios de los nivelas altos y medios de gobierno consiguiendo credenciales de elector, con líderes de sindicatos que ofrecen como borregos a sus afiliados con la consigna que voten por el candidato del tricolor so pena de enfrentar castigos, con pandilleros con brazalete que los identifica contratados para inhibir el voto.
Pero a la ciudadanía ya no la espantan con el petate del muerto, ni con dádivas de ocasión. La ciudadanía está consciente que las elecciones del 2012 es una oportunidad de oro que utilizará para cambiar el rumbo político del estado. Tiene el arma más poderosa, que es la conciencia y la credencial de elector.
Los agravios a la sociedad son tantos: desempleo generador de hambre y violencia; bajos salarios que condenan a la desnutrición; violencia cotidiana que llena de rojo los noticieros y enluta a las familias; el campo devastado e inundado; asaltos con violencia por todos los rumbos de la ciudad; voracidad y rapiña de los funcionarios; escuelas secuestradas por el sindicato de la vitalicia y desacreditada Elba Esther, que creó un partido político (el PANAL) para ponerlo al servicio de su venalidad y estulticia; falta de apoyo a los verdaderos maestros de la escuela pública. Desde todo ello hasta el abandono a los enfermos en los hospitales, a los ancianos, el abandono, a la sociedad en manos de una mafia de las televisoras nacionales y las estaciones de radio que ocultan información, difunden noticias y programas bobos y se suman a campañas sucias.
A todo ello los simpatizantes y militantes responden con lealtad al Nuevo Proyecto alternativo de Nación. A todo ello los dirigentes de todos los niveles en los partidos de oposición deberán cumplir con su tarea de mantenerse unidos ante las circunstancias de interés que ya están presente en la disputa partidaria por las candidaturas locales.
Todo ello lo consigno porque está en nuestra tierra -“nuestra agua”- Andrés Manuel López Obrador en reuniones como precandidato. Sea bienvenido. Encuentra a un pueblo anhelante, a un pueblo que tiene más de veinte años de mantener viva la esperanza de que el PRD gane el gobierno del estado y que AMLO sea presidente de la república. Este pueblo ha pasado de todo: mítines en días de lluvia y calor calcinante, inundaciones, golpes con palos en Plaza de armas en enero de 1995, marchas por las carreteras del estado y del país; persecuciones y hostigamiento laboral; discriminación social, política y laboral; hambre y sacrificios de campesinos, amas de casa, indígenas, obreros y profesionistas que gustosos sacrifican su tiempo, que empeñan algunos bienes o venden sus animalitos para sufragar sus viajes a la ciudad de México D.F, o a las cabeceras municipales de la entidad y acompañar a Andrés Manuel López Obrador en su camino empedrado rumbo a la presidencia de la república. Agrego sin duda a los que están en Resistencia civil y que no encuentran ni comprensión ni consuelo en su deuda leonina con CFE, que los intimida con cortes arbitrarios, los injuria como ladrones de luz, y los acorrala con citatorios jurídicos y que saben –los deudores- que sólo tendrá fin el martirio cuando gane el gobierno local y el federal el PRD coaligado con el PT y Movimiento Ciudadano.
Está escrito que en el 2012 ganaremos las elecciones tanto federales como locales. Y será posible si cada quien hacemos la parte que nos corresponde desde la trinchera en la que estamos. Y sin duda la organización y unidad son la clave.